¡Siempre me matan, ay! ¡Siempre me matan!

Autor: Christina Guinassi, Paris Abril 2023

Ignacio, joven universitario de San Marcos, manifestaba contra los abusos
políticos recientes. Impedimento de gobernar de un presidente elegido por el
pueblo y al que encarcelan impunemente. Arbitrariedades del congreso, uso de
la fuerza criminal y una improvisada presidenta que, sin asco, hace matar y
maltratar a ciudadanos que protestan o se encuentran en el perímetro de las
protestas.
En el momento de recibir una bala mortal, nuestro soñador héroe cantaba unos
versos compuestos por Nicolas Guillén “Me matan si no trabajo y si trabajo me
matan, siempre me matan, ay! Siempre me matan.”
Para nuestro consuelo, este estudiante había dejado un poema que les transmito
inmediatamente.

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Contra un poder nefasto que dura siglos, hoy protesto.
Mi reclamo se inicio mucho antes que naciera.
Mi cuerpo y mi alma me dicen, no, no acepto.
Ya no puedo más, bata ya, esta es mi patria, mi tierra.

Sí, por ella perecieron miles y miles de pobladores que ahora gritan.
Que saben que los engañan y poco a poco los eliminan.
Agonizan trabajando, construyendo carreteras, escuelas y encima los ejecutan.
Mundo absurdo, lleno de incongruencias que nos atacan.

Por eso canto, “siempre me matan, ¡ay! Siempre me matan.”
Trabaje o no trabaje, pero por eso, esta vez no me atan.
Con el ánimo alto, vamos más lejos y las majaderías se acaban.
Estamos decididos luchamos por una vida mejor y no nos callan.

Pienso en mi padre, campesino que murió de tanto que lo maltrataban.
En este pueblo descendiente de grandes civilizaciones, las iras se desatan.
Las dudas se desvanecen y los espíritus abiertos, se despiertan.
El orgullo legítimo se ubica donde debe y no nos lo arrebatan.

En mi alrededor, algunos nos dicen, es peligroso no vayan.
Estoy seguro que, aunque me disparen, ellos no ganan.
Dispuesto estoy a alzar mi voz, las razones no faltan.
Mi sacrificio no será vano, tendrá eco y los otros oirán.

Tengo la certeza que esto se sabrá y que las coyunturas cambiarán.
Los hechos graves y lo insoportable, en los pobladores se juntan.
Por eso me voy tranquilo, sabiendo que la realidad, la verán.
Me imaginarán, me recordarán y esta verdad todos la conocerán.

París, abril 2023.

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